Tres son los candidatos que realizaron ayer sus presentaciones buscando definir los votos necesarios para obtener el puesto de la organización panamericana.
Los hombres (y mujer) en pugna son el ex izquierdista y actual sirviente de la Casa Blanca, el uruguayo Luis Almagro, el un poco más moderado candidato derechista, el promotor de la creación del reaccionario Grupo de Lima, el peruano Hugo de Zela y la ex canciller ecuatoriana durante la gestión de Rafael Correa, María Fernanda Espinosa.
Durante la jornada los candidatos realizaron las exposiciones y propuestas ante el Consejo Permanente en caso de llegar a ocupar el cargo de mayor importancia del organismo.
Los tres candidatos de derecha a izquierda
Luis Almagro
El uruguayo Luis Almagro, actual secretario general; el embajador de Perú en Estados Unidos, Hugo de Zela, y la ex canciller ecuatoriana María Fernanda Espinosa hicieron su último esfuerzo retórico en la presentación de sus propuestas, con la esperanza de lograr el apoyo de al menos 18 de los 34 estados miembros para ser consagrados en las elecciones del 20 de marzo próximo.
Almagro, quien llegó a la OEA en marzo de 2015 tras haber sido canciller de la administración de José Mujica, prometió mantener su postura dura frente a los gobiernos de Venezuela, Cuba y Nicaragua.
"Los de Cuba, Venezuela y Nicaragua son casos de alteración constitucional y gobiernos ilegítimos", subrayó Almagro, quien es objeto de múltiples críticas en el seno de la OEA por sus dificultades para encontrar vías de diálogo.
"No es que no hayamos trabajado con otros países con procesos de diálogo y negociación; pero, diálogo en torno a la democratización, diálogo en torno a la liberación de presos políticos, diálogo en torno al fortalecimiento institucional y diálogo para procesos electorales creíbles", subrayó, citado por EFE.
Cuando Almagro llegó a la OEA impulsado por un gobierno de izquierda se hicieron múltiples especulaciones acerca de la puesta en marcha de una política favorable a Venezuela, Cuba y Nicaragua, pero al terminar su actual período el uruguayo terminó acusado por esos países de haber actuado como un "títere" de Estados Unidos, la nación con mayor influencia en el organismo.
Hugo De Zela
El peruano De Zela, en cambio, levantó las banderas de la negociación, el diálogo y la mediación para resolver los problemas del hemisferio.
"La Secretaría General tiene que ser parte de la solución; su papel no puede ser exacerbar las crisis, ni adoptar posiciones que excluyan a la OEA de los esfuerzos de negociación dirigidos a tratar de resolverlas", expuso el diplomático en una frase que pareció un velada crítica a la actuación de Almagro.
De Zela -uno de los principales impulsores del Grupo de Lima cuando fue vicecanciller peruano- se manifestó en varias ocasiones en contra de cualquier posibilidad del uso de la fuerza en Venezuela y sostiene que la única posibilidad para que el país caribeño salga de la crisis depende de un acuerdo entre los seguidores del chavismo y los opositores liderados por Juan Guaidó.
María Fernanda Espinosa
Otra aspirante es la ecuatoriana Espinosa, quien procura en convertirse en la primera mujer en liderar la OEA.
Espinosa fue la primera mujer latinoamericana en presidir la Asamblea General de la ONU, después de haber ejercido por un breve período como canciller de Ecuador.
En su exposición, prometió consagrar un "quinquenio de las mujeres" en la OEA en caso de ser electa y poner en marcha una política de "cero tolerancia" para combatir el acoso sexual y laboral.
"No promoveré ideologías personales o intereses de grupos sociales o partidistas", subrayó.
El único de los tres candidatos respaldado por el gobierno de su país es De Zela, ya que Almagro no cuenta con el aval del uruguayo Tabaré Vázquez -aunque sí con el del presidente electo Luis Lacalle Pou, que asumirá el gobierno el 1 de marzo- y Espinosa lucha contra la desconfianza de miembros de la administración que encabeza el mandatario Lenín Moreno.
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