En una ceremonia realizada el viernes en el Palacio de Gobierno, en Lima, la capital, Óscar Maúrtua juró ante el mandatario volver a dirigir la Cancillería peruana, el cargo que ocupó entre el 2005 y el 2007 durante el Gobierno del expresidente Alejandro Toledo.
De esta forma, Maúrtua sustituye a Héctor Béjar, sociólogo y exguerrillero de 85 años, quien fue obligado a renunciar el martes pasado después de permanecer apenas 19 días en el cargo, tras declaraciones en las que afirmó que el inicio del terrorismo en el país fue provocado por la Marina de Guerra.
Óacar Maúrtua, de 74 años, es un diplomático de carrera, jurista y abogado peruano. Además de canciller, desempeñó el cargo de embajador del Perú en Ecuador, Tailandia, Vietnam y Laos, Bolivia y Canadá.
Designación de Maúrtua no gusta a la izquierda
Previa a la juramentación de Maúrtua, su nominación provocó críticas de algunos parlamentarios, incluso del mismo partido oficialista, el marxista Perú Libre (PL).
“Espero que sea una broma de mal gusto”, escribió en Twitter el congresista Guillermo Bermejo (PL), quien aseguró que Maúrtua “no puede representar a un gobierno de izquierda” por ser "una persona alineada a la política injerencista de los EE.UU.”.
Con todo, el flamante canciller, junto al resto del Gabinete de Castillo, solicitará el voto de confianza al Congreso el próximo 26 de agosto.
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