Así ha informado este lunes la cadena surcoreana KBS, explicando que la decisión fue tomada después de que Luchadores por una Corea del Norte Libre, grupo liderado por el desertor norcoreano Park Sang-hak lanzara el pasado mes de mayo al aire 10 grandes globos, cargados de 500 000 folletos de propaganda contra Pyongyang.
Por su parte, la hermana del líder norcoreano, Kim Yo-jong, calificando el envío de volantes como una “provocación intolerable”, alertó a principios de mayo que Pyongyang adoptará una “acción correspondiente” al respecto.
Las autoridades norcoreanas acusan a Seúl de permitir que los desertores lancen panfletos y globos con folletos críticos al líder norcoreano, Kim Jong-un, desde el Sur hacia el Norte.
Además, en los últimos meses han alertado que estos globos podrían transmitir el nuevo coronavirus, causante de la COVID-19.
Ante esto, el Gobierno norcoreano instó a la nación a mantenerse alerta contra las infecciones por la COVID-19 mediante “objetos extraños” que flotan en el aire.
Corea del Norte ha alertado a Seúl de que Pyongyang se retiraría de una serie de acuerdos, incluido el pacto militar de 2008, si no detiene el envío de panfletos en la frontera.
Los dos vecinos de la península coreana se encuentran en “una guerra técnica” desde el fin del conflicto armado que los enfrentó entre 1950 y 1953, y acabó con un armisticio en lugar de un tratado de paz.
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