La Central Unitaria de Trabajadores (CUT) de Colombia anunció una gran movilización para la “Toma de Bogotá” contra las políticas neoliberales de Duque el 9 de junio.
En concreto, puso de relieve que el Gobierno trata de “desgastar” las fuerzas del paro dilatando la firma de los preacuerdos, “sabemos con absoluta seguridad que nos están mamando gallo”, enfatizó.
“Ante la negativa del Gobierno a firmar el preacuerdo sobre garantías para ejercer la protesta social, construido el 24 de mayo, y ante la dilación permanente para firmarlo e instalar mesas de negociación, se invita a la toma de Bogotá”, subrayó Arias.
Aseveró también que harán una convocatoria en varias ciudades para concentrarse en la capital, ya que, conforme a Arias, frente a la dilación del Gobierno lo que le queda al CNP es “reactivar” las manifestaciones y hacer un “fortalecimiento” con otros sectores sociales del país.
El mismo miércoles, salieron a las calles los sindicatos, estudiantes, trabajadores y otros grupos sociales, que buscan presionar al Gobierno ultraderechista de Iván Duque, a fin de promover cambios económicos y sociales.
Las protestas que experimenta Colombia se deben, entre otros motivos, a las propuestas fiscales planteadas por el Ejecutivo de Duque. 36 días consecutivos, en que los ciudadanos también han alzado la voz en contra de la militarización del país y la mano dura de la Policía antisturbios y efectivos militares.
El Comité Nacional del Paro y el Gobierno ya suman diez reuniones para buscar un acuerdo sobre garantías a la protesta social. Sin embargo, los avances logrados no son suficientes. Los representantes de las movilizaciones lamentan que Duque se niegue a firmar el preacuerdo consensuado.
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