Un vecino, asiduo visitante al solar se comunicó con nuestra redacción luego de realizar una de sus habituales visitas y encontrarse con el ombú histórico, el mismo que plantó Fernando Pozzo, horriblemente mutilado.
Se trata de un hecho gravísimo, porque la especie es altamente susceptible a la acción de un hongo del género graphium, el cual literalmente lo seca por dentro.
Este ombú es un retoño de los ombúes históricos que plantó Pozzo cuando descubrió el sitio natal de Guillermo Hudson en la década de los cuarentas del siglo pasado.
Según pudo saber este vecino dicho ombucidio sucedió por una indicación de la nueva directora del museo, Viviana Torres, la cual adolece de toda formación en interpretación del paisaje natural además de estar 'asesorada' por dos oscuros personajes, que según la misma fuente son Lucas Rúa y Esteban Manarino.
El primero, de anárquica participación 'ambientalista' en la costa del Río de la Plata de la localidad de Guillermo Enrique Hudson, municipalidad de Berazategui, donde no se cansaba de denostar el accionar municipal.
Por su parte Manarino es un bizarro y sórdido personaje que se reivindica públicamente como militante de Chicho Basile, un oscuro dirigente varelense a quien se ha acusado de formar parte del aparato represivo de la dictadura cívico militar genocida.
Según esta fuente habría sido el propio Manarino quien penetró en el predio, amenazó a los trabajadores del mismo y junto a otros miembros de su organización, munidos de machetes y otros elementos cortantes, con el fin de destruir la vegetación circundante al edificio de la biblioteca, ignorando su valor ambiental y paisajístico con el fin de que "a Viviana le entre la lú" (textual).
Se ignora si los lazos entre la directora del solar y estos personajes son políticos o de otra índole, no obstante, se trate de lo que se trate, se está avanzando en la destrucción de un invaluable patrimonio ambiental e histórico, no solo de Varela, sino de la República Argentina toda y porque no, de la humanidad.
Es importante aclarar que desde esta redacción se intentó vanamente contactar mediante llamados telefónicos a Viviana Torres para que explicara esta situación, pero solo después de numerosos llamados y mensajes respondió brevemente y nunca mas volvió a contestar.
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