Ya no piensas así. La predicación a favor de armar a la población, sus movimientos para atraer a las Fuerzas Armadas y su acercamiento a la policía militar fueron decisivos para que el periodista cambiara de opinión.
Para él, la acción del presidente sugiere el espectro de una guerra civil o un golpe de estado, sin necesariamente la participación directa de las fuerzas. "Muy posiblemente pueda estar articulando un golpe usando la policía militar y neutralizando a las fuerzas armadas", dijo Gabeira.
Hace casi un año, criticó al gobierno de Bolsonaro, pero mostró confianza en las instituciones. Recientemente, comenzaste a defender que los brasileños se movilizan para detener un posible golpe de Estado por parte del presidente. ¿Qué sucedió?
El primer aspecto de mi confianza fueron los equilibrios democráticos, que se basaron en el Congreso y la Corte Suprema. Estos saldos continúan tratando de enfrentar este proceso. Pero hay una carga muy intensa sobre ellos hoy, desde el bolsonarismo. Las manifestaciones estaban claramente destinadas a cerrar el Congreso y la Corte Suprema. Entonces, lo que ha cambiado es que Bolsonaro no acepta muy bien la presencia de estos saldos, por el contrario, está tratando de neutralizar algunos de ellos. Esto es un hecho. Otra es la relación con las Fuerzas Armadas, que siempre (desde la re-democratización) siempre han tenido un papel democrático y han funcionado. Y las Fuerzas Armadas estuvieron muy involucradas por Bolsonaro. No solo por el trabajo presupuestario, sino por la visión de la reforma de pensiones de los militares, por la entrada de 3 mil soldados en el gobierno, ¿sabes? Y especialmente ahora por la alianza que hicieron en Salud.
Prácticamente, (las Fuerzas) están atrayendo, participando o compartiendo una política que puede tener un impacto perjudicial en ellos. Entonces, todo cambió mucho la imagen.
¿Algo ha acelerado recientemente el cambio de opinión?
Esa reunión (el 22 de abril) presentó hechos alarmantes. Lo más importante fue la defensa de Bolsonaro del uso de armas. Si recuerdas la campaña, Bolsonaro tuvo la necesidad de defenderse de la violencia urbana como arma para la población. Pero en esa reunión se hizo evidente que él tiene una visión de las armas para la expresión de su visión política.
La persona armada podría expresarse políticamente a través de las armas. Incluso sugirió que esto se hiciera contra la cuarentena. Cuatro generales del ejército estuvieron presentes y no movieron una pajita, ni hubo ninguna expresión de sorpresa. Esto es absolutamente nuevo: los generales escuchan la idea de armar a la población para su expresión política, sin tener ninguna reacción.
En la campaña de 2018, mucha gente dijo "Bolsonaro simplemente dice estas cosas horribles para ganar un voto". O: "Ya pensó así, ya no piensa más ..."
Bolsonaro, en la Cámara de Diputados, tenía una táctica de popularización. Utilizó varios temas, como los derechos humanos, como el tema de la mujer, la homosexualidad ...
Él usó esto para hacerse popular. La táctica consistía en conocer a algunos conocidos, como Maria do Rosário, Jean Wyllys, y debatir frente a las cámaras para sostener a su audiencia. Pero no tenía mucha idea de una propuesta para Brasil. Sentía nostalgia por el gobierno militar, pero en ese momento no correspondía con la situación de las Fuerzas Armadas. Al llegar al gobierno, persigue una política de seducción por parte de las fuerzas armadas. Él está usando las Fuerzas Armadas con bastante claridad como un elemento de intimidación. Y las Fuerzas Armadas, simplemente, se están permitiendo ser utilizadas.
Y ese no es su único peligro. Tiene buena penetración en la policía militar. Entonces, muy posiblemente, podría estar articulando un golpe de estado utilizando la policía militar y neutralizando a las Fuerzas Armadas. Incluso puede estar en un punto donde no necesita usar las fuerzas armadas. Es suficiente que se mantengan neutrales y dejen actuar a la Policía Militar.
Cuando comenzó el gobierno, se esperaba que los militares fueran un factor moderador en los impulsos de Bolsonaro.
Mire, sucedió lo siguiente: en lugar de que los militares se convirtieran en moderadores de Bolsonaro, se convirtió en un factor de radicalización de los militares. El general Augusto Heleno se ha convertido en un radical, cada vez más grande, dentro del gobierno. Por supuesto, en su caso, ese arresto en España de un oficial de la Fuerza Aérea (en realidad, el sargento Manoel Silva Rodrigues) pasó cocaína. Y él, como el hombre de GSI, fue considerado responsable del agujero de seguridad por Carlos Bolsonaro. Después de eso, se asustó y comenzó a unirse a este grupo ideológico. Otros generales, por ejemplo, Braga Netto (jefe de la Casa Civil) incluso tienen una buena capacidad organizativa, pero no pueden mantener a Bolsonaro.
Del mismo modo, (vicepresidente Hamilton) Mourão no tiene este papel. Mourão siempre ha sido considerado por aquellos cercanos a Bolsonaro como un oponente potencial. Luego se retiró. El general (Luiz Eduardo) Ramos (jefe de la Secretaría de Gobierno), quien dio una entrevista diciendo que todos son demócratas y que es un delito para las Fuerzas Armadas pensar que pueden ser cómplices de un golpe de estado, también es el tipo que lo está haciendo. La política de Bolsonaro. Entonces, estos generales vieron que la propuesta de Bolsonaro es la guerra civil. Saben muy bien que Bolsonaro es un hombre que gana las elecciones y denuncia las elecciones como fraudulentas. Entonces, con las armas en la mano, ¿qué querrás hacer? Querrás rebelarte. Ellos lo saben.
¿Qué explica la reacción de Bolsonaro ante la pandemia?
Bolsonaro piensa muy corto. Él pensó: ‘¿Qué me puede hacer esto? ¿Qué puede significar esto para mi gobierno? Entonces, una crisis económica, el desempleo, dificultará mi gestión. Entonces, negaré esta epidemia '. Negó la epidemia porque pensó que era contra él.
¿Cómo evalúa la participación de Bolsonaro en las manifestaciones que exigen el cierre del Supremo y el Congreso?
Cualquier demócrata, frente a tal manifestación, recorre un largo camino. Él (Bolsonaro) saludará a los manifestantes allí. De alguna manera muestra, con eso, que simpatizas con su causa. Tiene cierta simpatía por la causa del cierre del Congreso y el cierre del Supremo.
¿Se puede llevar a Bolsonaro a respetar las leyes?
Creo que ahora es evidente que Bolsonaro quiere armar al pueblo para la expresión política, para que el pueblo tome la posición política que quiera. Está buscando crear milicias armadas. Y un hombre que quiere armar a parte de la población se está preparando para una guerra civil. En ese momento, estaba bastante claro para mí cuál es su diseño, cuál es la posición. Entonces, creo que tienes que trabajar para neutralizarlo con miras a ir hasta 2022, o eliminarlo antes de eso.
Por Wilson Tosta, El Estadista
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