Cientos de independentistas, convocados por la Asamblea Nacional Catalana y Òmnium Cultural, partieron esta mañana de L’Espluga de Francolí, en Tarragona, rumbo al monasterio de Poblet, donde los reyes de España estaban de visita.
Enarbolando una pancarta con el lema “Catalunya no tiene rey”, y equipados con esteladas y banderas republicanas, denunciaron la corrupción y el abuso de poder por parte de la monarquía española.
Mientras los reyes Felipe sexto y doña Letizia visitaban las instalaciones del monasterio, durante un viaje relámpago a Cataluña que forma parte de la gira que realizan por distintas regiones españolas, a las afueras del recinto se vivieron momentos de gran tensión entre los manifestantes y los Mossos, que al menos en una ocasión emplearon sus porras para recuperar la línea policial que habían establecido para impedir el paso de los independentistas.
La visita real se produce en plena polémica por los negocios ocultos del rey emérito, Juan Carlos I, que están siendo investigados por la Fiscalía del Tribunal Supremo. I
Inclusive el presidente de Cataluña, Quim Torrá, ha solicitado a los servicios jurídicos de su gobierno presentar una denuncia contra Juan Carlos I por presunta corrupción.
Mientras tanto, desde el Gobierno español minimizan las presuntas irregularidades que afectan al rey emérito a toda la familia Borbón.
Las relaciones de Felipe sexto con Cataluña se han visto marcadas por su intervención el 3 de octubre de 2017 en respuesta al referéndum del 1 de octubre y después de las imágenes de violencia policial que fueron interpretadas por los independentistas como un aval a los excesos de los cuerpos estatales.
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