La cámara fúnebre, situada en las afueras de la histórica ciudad de Xian, capital de la provincia de Shaanxi, que incluye cuatro rampas descendientes a una profundidad máxima de 30 metros bajo tierra, es la última morada del monarca Wen, el quinto emperador de la dinastía Han, informaron el martes los medios chinos.
Wen fue uno de los monarcas más conocidos de la dinastía Han, quien en el siglo II antes de la era común ordenó examinar los conocimientos de todos los funcionarios de su imperio.
Este descubrimiento es de gran importancia histórica porque la ubicación de la tumba del emperador Wen fue un misterio durante siglos.
El descubrimiento ocurrió a raíz de un robo que se dio a conocer cuando la casa de subastas Sotheby's exhibió en Estados Unidos seis figuras de terracota negra de la dinastía Han provenientes de una tumba en China. Entonces las autoridades chinas iniciaron una investigación sobre la procedencia de los objetos.
Después de mucho esfuerzo, las figuras fueron devueltas a Xian en 2003 y posteriormente se determinó que saqueadores de tumbas las habían desenterrado en la aldea de Jiangcun.
Un experto de la Academia de Arqueología de Shaanxi dijo el martes en rueda de prensa que la estructura y las dimensiones del mausoleo de Wen son similares a las de otros dos mausoleos ya conocidos y atribuidos a otros emperadores de la dinastía Han.
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