Durante una entrevista concedida el viernes a la agencia de noticias rusa TASS, el funcionario ruso señaló que el sistema financiero que domina actualmente el mundo de los negocios fue creado por Washington y es una herramienta para lograr los objetivos políticos de un grupo de países, mientras que resulta “apenas adecuado para un orden mundial multipolar”.
En este sentido, el viceministro subrayó que muchos Estados, tras percatarse de la ilegitimidad de las sanciones sin precedentes impuestas contra Moscú, están considerando “desdolarizar” su actividad económica para proteger su propia soberanía.
Además, advirtió que, en el entorno actual, Occidente pretende seguir abusando de su posición privilegiada para luego explicar que el camino hacia la negativa a utilizar el dólar en el comercio multinacional es una tarea “bastante soluble”, siempre y cuando haya “voluntad política”.
Varios economistas recalcan que las medidas antirrusas impulsarán a otras monedas a desempeñar un papel más importante en el mundo. De hecho, en el tope de las tensiones entre Rusia y Ucrania, la desdolarización se ha convertido en una tendencia internacional ante las sanciones unilaterales de EE.UU. y sus aliados occidentales, de modo que varios Estados han expresado su deseo de abandonar el dólar o reducir su uso en las transacciones comerciales.
En concreto, las autoridades rusas aseveran que la impredecible política estadounidense ha socavado la confiabilidad del dólar en los pagos mutuos, por lo que abogan por desplazar a esa divisa.
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