El Ministerio ruso de Desarrollo Digital y Comunicaciones junto con cuatro compañías operadoras pusieron a prueba la estabilidad de conmutación y la seguridad del uso del Internet de las cosas y de la telefonía móvil, incluidas las medidas de protección de datos personales y la interceptación del tráfico informático.
El origen de este proyecto procede de la ley sobre el funcionamiento sostenible del segmento ruso de la red global que comenzó a regir el pasado 1 de noviembre, y el propósito del mismo es la separación del segmento ruso del resto de la red mundial, así como hacer frente a otros peligros provenientes del exterior.
En este sentido, el viceministro Alexéi Sokolov explicó el lunes que el objetivo de las autoridades del Ministerio de Desarrollo Digital y Comunicaciones y las operadoras para llevar a cabo estas pruebas ha sido mostrar “en general listas para reaccionar con eficacia” ante los riesgos y amenazas.
Asimismo, el trabajo del arreglo de las redes de comunicación tras una situación emergente y un desastre natural también fueron parte de la agenda, las cuales contaron con la coordinación de distintas autoridades.
De acuerdo con una presentación confeccionada por el Ministerio, citado por el periódico Védomosti, en este entrenamiento conjunto cada operadora recibió 18 guiones de ataques, de los cuales dos tercios de ellos fueron a través del sistema de señalización por el canal común Nº 7 (SS7), utilizado para el establecimiento y la finalización de llamadas.
El otro un tercio fue mediante uno de los principales protocolos de las redes 4G: el Diameter (Diámetro) y el ensayo dentro de cada guion duró en torno a los 20 minutos.
Esto ha sido el primer ejercicio de mantenimiento estable del Runet, que según apreciaciones del Ministerio de Desarrollo Digital y Comunicaciones se realizó con éxito.
Dicho entrenamiento se llevó a cabo en las ciudades de Moscú, Rostov y Vladimir, siempre en unos “segmentos, caballetes y polígonos autónomos” para que los usuarios no sufrieran dificultades con el acceso a Internet.
Hasta el momento, los medios de comunicación del país eslavo son blancos de diferentes ataques desde la Unión Europa (UE) y Estados Unidos, con el objetivo de robar informaciones relacionadas a las tecnologías de la industria nuclear y de defensa del país euroasiático.
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En este campo, las autoridades rusas tienen como objetivo crear un sistema por medio del cual se podría alcanzar la seguridad de comunicaciones sin inventar algoritmos de cifrado.
Los funcionarios prometen que los simulacros se repetirán con regularidad y abarcarán toda una variedad de influencias potenciales en las redes rusas.
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