El candidato del MAS, Luis Arce, condenó la acción de un grupo de choque que destruyó un local de su partido en la oriental ciudad de Santa Cruz y en el barrio Plan 3000, de población mayoritariamente migrante andina y considerado un bastión del MAS.
Manifestó su repudio el proceder de 'grupos organizados y financiados por partidos radicales de derecha', que ayer destrozaron y quemaron la sede y demandó 'sanciones y respeto a nuestro derecho de hacer campaña pacíficamente'.
Por su parte, la candidata del MAS al Parlamento por la jurisdicción del Plan 3000, Brenda Segovia, precisó que los atacantes no viven en la zona y llegaron en dos camionetas, armados de garrotes, petardos de dinamita y piedras.
'Felizmente los verdaderos vecinos salieron a defendernos', relato la candidata a diputada, quien identificó a los atacantes como miembros de grupos radicales.
El grave incidente se sumó a cerca de medio centenar de hechos similares, como el ocurrido la semana pasada en la sureña ciudad de Potosí, donde un grupo paramilitar agredió a militantes del partido del líder indígena Evo Morales, según denunció el diputado del MAS Víctor Borda.
La violencia derechista parece intensificarse tras encuestas que vaticinan que Arce ganará las elecciones y hasta es posible que alcance la presidencia en la primera vuelta electoral y coincide con claros síntomas de descomposición del Gobierno de Jeanine Áñez.
El analista Óscar Rotundo advirtió que la descomposición del régimen se expresa en las sucesivas renuncias de ministros y otros altos funcionarios, las pugnas entre facciones, los crecientes e impunes casos de corrupción, el colapso del sistema de salud ante la pandemia de coronavirus y la crisis económica y su secuela social.
Medios de difusión independientes denunciaron que ante esa posibilidad, el Gobierno golpista y los partidos de derecha pretenden incrementar la violencia para desestabilizar el proceso electoral e impedir los comicios o volver a desconocer su resultado y anularlos si ganara el MAS.
Un informe difundido en el exterior señaló que los planes desestabilizadores incluyen aprestos para realizar actos terroristas y atribuirlos al MAS, a fin de justificar la represión contra sus dirigentes y militantes e impedir su retorno al Gobierno.
Publicar un comentario