“A menos que expresen su preocupación por los graves abusos de Arabia Saudí, la Fórmula Uno y los artistas que participan corren el riesgo de reforzar al Gobierno saudí en sus intentos por lavar su imagen”, ha indicado Michael Page, subdirector para Asia Occidental de HRW.
De acuerdo a la nota, el régimen saudí, encabezado de facto por el príncipe heredero, Muhamad bin Salman, está experimentando “el peor período de represión” en la historia contemporánea del país, llegando al punto de que las autoridades penitenciarias torturan a los detenidos y someten a algunos de sus familiares a castigos colectivos.
Aludiendo a las detenciones arbitrarias de decenas de disidentes políticos, activistas de derechos humanos y periodistas, la HRW ha subrayado que Riad aún no ha aceptado la responsabilidad del brutal asesinato del periodista saudí, Jamal Khashoggi, por agentes del reino en la ciudad turca de Estambul en octubre de 2018.
El Gran Premio de Fórmula Uno, los conciertos y eventos asociados se celebrará entre el 3 y el 5 de diciembre de 2021 en la ciudad de Yeda, en el oeste del país árabe.
La monarquía saudí enfrenta serios cuestionamientos por su largo historial de violaciones de derechos humanos, las ejecuciones masivas y también crímenes de guerra en el país más pobre del mundo árabe, Yemen.
Diversas organizaciones globales defensoras de los derechos humanos han alertado de las sistemáticas violaciones de los DD.HH. que se cometen en Arabia Saudí con la total impunidad que le otorga la comunidad internacional, encabezada por su principal aliado, EE.UU.
Publicar un comentario