En diálogo con Atilio Borón, el político condenó las acciones para acabar con la libertad, reputación y la vida del ex vicemandatario Jorge Glas, liberado por un habeas corpus concedido recientemente tras cuatro años y medio encarcelado debido a procesos judiciales manipulados.
Su libertad es un acto de justicia, pero ahora viene la arremetida del poder estatal capturado por una élite. No estamos confiados. Hay una gran preocupación porque esa gente no tiene límites ni escrúpulos, señaló en declaraciones divulgadas por Somos Radio y la emisora de la Universidad Nacional de Avellaneda.
Correa señaló que en su país hubo un golpe de Estado suave y ocurrió el caso de judicialización de la política más brutal de Latinoamérica.
Todo lo disfrazaron de democracia. Se apoderaron de la nación de forma ilegal e inconstitucional, cambiaron un 70 por ciento de los miembros de la Corte y pusieron a contrarios a mi Gobierno para que nos persiguieran. La primera víctima fue Glas por oponerse a la corrupción y traición de Lenín Moreno, aseveró.
Además, precisó que usaron los testimonios de funcionarios corruptos para encarcelar al entonces vicepresidente y lo condenaron sin ninguna prueba, con un código legal que estaba derogado.
No le permitieron la libertad condicional y lo ubicaron en una prisión común, donde se dañó un hombro tras resbalar en un charco de sangre. En 2021 hubo cerca de 300 muertos durante motines en cárceles ecuatorianas. Eso lo tuvo que vivir el vicemandatario de la República y el mundo no lo sabe, apuntó.
Correa indicó que existen 400 procesos penales contra miembros de su equipo de gobierno y 49 contra él.
Nos robaron nuestra tranquilidad, reputación, libertad y democracia. Me quitaron mis derechos políticos e impidieron que me inscribiera como candidato para las elecciones de 2021. Me acusaron de dirigir una organización criminal y, como no tenían pruebas, mi sentencia dice que realizaba “influjo psíquico”, indicó.
La peor corrupción es usar el poder político no para el bien común, sino para beneficio personal. Están saqueando mi país, sentenció.
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