“El litio se ha convertido en la fuente de energía más necesitada en el mundo. Entre el 2001 y 2002, California [EE.UU.] estaba a punto de beneficiarse con el gas boliviano exportado por puerto chileno con el proyecto Pacific LNG. Ahora debemos cuidar el litio de esos planes imperialistas”, afirmó el viernes Morales en su cuenta de Twitter.
El ex presidente boliviano también expresó el jueves su preocupación por el litio boliviano y alertó de los intentos del Occidente sobre este metal. “Lamentablemente el occidente solo nos quiere para que América Latina garantice la materia prima y no quieren que demos valor agregado a nuestros recursos naturales”, dijo durante una multitudinaria marcha en La Paz (capital administrativa de Bolivia).
Asimismo, el jefe de Estado dijo el pasado 24 de abril que Estados Unidos y las transnacionales interesadas en el litio de Bolivia estuvieron detrás del “golpe de Estado” que derivó en su renuncia en 2019.
El carbonato de litio tiene amplia demanda en el mercado internacional, debido a su empleo como componente de las baterías que utilizan los vehículos eléctricos.
De acuerdo a los datos del Servicio Geológico de EE.UU., Bolivia, con un aproximado de 21 millones de toneladas, posee alrededor de un cuarto de todos los recursos mundiales de litio, lo que, según expertos, ha sido uno de los temas de interés para la injerencia de Estados Unidos en asuntos del país.
Desde la Presidencia de Morales (2006-2019), el país andino dio pasos para la industrialización de sus reservas de litio, con altibajos.
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