Do Val había declarado ayer en una transmisión en vivo en redes sociales que Bolsonaro había intentado coaccionarlo para "dar un golpe de Estado junto con él" y que los detalles se conocerían en un reportaje que le había hecho la revista Veja.
En la entrevista, do Val acusó a Silveira de organizar una reunión, en diciembre, poco antes del traspaso de mando al entonces presidente electo Luiz Inácio Lula da Silva, en la que le propuso -delante de Bolsonaro- que grabara sin autorización cualquier conversación que comprometiera al presidente del Tribunal Superior Electoral (TSE), Alexandre de Moraes.
Anoche, interrogado durante casi cuatro horas por la Policía Federal, do Val se retractó de la acusación directa y dijo que Bolsonaro "sólo escuchó" el plan del ex diputado Silveira, detenido por ataques y amenazas a las instituciones.
Do Val dijo que durante toda la conversación el expresidente se mantuvo en silencio; que la sensación que tuvo fue que no sabía del asunto, y que Silveira buscó en ese encuentro obtener el consentimiento de ambos; que Bolsonaro en ningún momento rechazó el plan sino que se limitó a guardar silencio", dijo en el informe a la PF.
"Se notaba mucho el miedo de Daniel a vivir con la sombra de que Alexandre de Moraes quisiera detenerlo en cualquier momento. Así que quiso hacer lo contrario. Construyó un complot para que Alexandre fuera detenido", agregó do Val en una entrevista con el diario brasileño Folha do Sao Paulo.
Según su testimonio, Silveira le preguntó "si estaba dispuesto a realizar una misión muy importante", es decir, grabar a De Moraes, a quien debía conducirlo a "decir algo que cruzara la línea de la Constitución".
"La grabación serviría entonces para invalidar las elecciones, detener a Alexandre y que el presidente siguiera en el poder (...) Es como si Daniel intentara convencernos a Bolsonaro y a mí de que hiciéramos esta acción para que Bolsonaro también continuara, para evitar que Lula subiera al poder y, sobre todo, para quitar del medio a Alexandre de Moraes", explicó a Folha, y agregó que la idea del juez supremo arrestado le parecía "infantil".
En su declaración a la PF dijo que hubo un momento, "él único" de la conversación, en el que Bolsonaro se pronunció y dijo que "esperaría", agregó el militar de 51 años, que es dueño de una empresa de seguridad y dio cursos en Estados Unidos a fuerzas policiales, del FBI y la DEA, puntualizó Europa Press.
Días después de aquella reunión, do Val envió un mensaje a Silveira confirmando que no participaría en ese plan y acto seguido habló personalmente con De Moraes para informarle el contenido del encuentro, del cual ya había tenido un anticipo de boca del propio senador.
El objetivo del plan, según el relato de do Val, era impugnar los resultados de las elecciones e impedir la toma de posesión de Lula.
A lo largo del día, el senador hizo cambios a las declaraciones que había dado a la revista Veja.
El miércoles, en una discusión con miembros del liberal Movimento Brasil Livre (MBL), do Val mencionó por primera vez la existencia de la reunión con Bolsonaro y Silveira y dijo que el exmandatario le habría impuesto participar en el plan.
"Voy a tirar una bomba. El viernes (por hoy) saldrá en la revista Veja el intento de Bolsonaro de obligarme a dar un golpe de Estado con él", dijo.
En la primera versión a la revista Veja, afirmó que el encuentro se había realizado en el Palacio de la Alvorada, residencia oficial de la Presidencia de la República, adonde habría llegado a bordo de un auto oficial sin identificación.
Ayer a la mañana, en una entrevista con GloboNews, cambió de ubicación. Dijo que la reunión había tenido lugar en la Granja do Torto, residencia de campo de la Presidencia de la República.
En su declaración a la PF, mencionó que "cree que era la casa del presidente, que como nunca había estado allí, no sabía exactamente qué casa era, si era la residencia oficial, la casa de recreo u otra".
Do Val también afirmó, en redes sociales, que pediría que le quitaran el mandato, que debería terminar en 2026. Unas horas más tarde, se retractó y dijo que estaba "estudiando" si pedía su destitución del cargo.
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