“Durante un día, hasta 90 militares ucranianos, dos vehículos de combate de infantería, dos vehículos blindados de combate y un obús D-30 fueron destruidos en esta zona”, ha expresado el portavoz de la Defensa rusa, Ígor Konashénkov, al respecto.
También el vocero ha aseverado que en la región de Donetsk las fuerzas rusas destruyeron un depósito ucraniano de munición de artillería y un depósito de combustible para equipos militares.
Rusia anunció el 20 de enero la toma del control de dos localidades de Kleshéyevka (un suburbio importante de la ciudad clave Bajmut, en Donbás) y Lobkóvoe en la provincia sureña de Zaporiyia.
La toma de las localidades ucranianas se realiza en el marco de la operación militar que lleva a cabo Rusia en Ucrania con el objetivo “desmilitarizar” y la “desnazificar” el país vecino, dado que las potencias occidentales lo están usando para invadir el territorio ruso.
Las autoridades rusas defienden la operación, aduciendo que tal medida fue una reacción a la conducta agresiva de Ucrania en la región de Donbás y al acto de la OTAN de ignorar siempre las demandas de seguridad de Moscú.
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