“El DNU modificaba más de 30 leyes, 600 artículos y le cambiaba la vida a la sociedad de una manera abrupta y perjudicial, a través de las cuotas de los colegios privadas, las tarifas, los alimentos, los medicamentos, la falta de empleo. El Senado se puso los pantalones largos y decidió que así no se puede avanzar”, acotó el legislador neuquino.
En declaraciones a Radio Provincia, recordó que “había un ideólogo de todo esto que se burlaba de los diputados, los senadores y el pueblo argentino, Federico Sturzenegger, quien se vanagloriaba de hacer una medida tan perversa y que le causaba tanto daño a la gente”.
Sin embargo, “se terminó esta etapa y espero que el gobierno de Milei tome debida nota y que, de ahora en adelante, transitemos una vida democrática como la que tenemos que tener”.
“El DNU en sí mismo mereció el amplio rechazo. Solo lo acompañó un tercio del cuerpo” y ahora “debemos recuperar la racionalidad, la prudencia y la posibilidad de dialogar y debatir”, por cuanto “no estamos dispuestos a ser sumisos y complacientes”, anexó Parrilli.
Acto seguido, manifestó que “desde el punto de vista político, la postura del Senado abre las puertas para que se pueda discutir” y “el Gobierno debería derogar el decreto antes de que esto ocurra y enviar proyecto por proyecto para que pueda ser debatido”.
Finalmente, manifestó que “ha quedado demostrado que acá no era contra la casta sino contra el pueblo argentino porque hay intereses económicos detrás de esta medida, y que estaban lucrando, como las prepagas y las proveedores de insumos, medicamentos, los bancos y las financieras. Como en la selva, habían cazado una presa y desguazaban al Estado”.
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