El domingo había empezado mal, con el país entero sin luz y parte de Brasil, Uruguay y Chile sufriendo también el virus PRO, lo que generó una preocupante parálisis por parte del gobierno que necesitó alrededor de siete horas para reaccionar y articular una respuesta para nada satisfactoria de cara a una sociedad que paga por el servicio un tres mil por ciento más que cuando Mauricio Macri ingresó a la Casa Rosada.
Pero eso no fue todo, porque cuando por fin se pudo articular una mínima respuesta la única empresa a la que se pudo haber responsabilizado es Yacilec, una empresa del grupo Macri que, como el Correo en su momento, le debe millonadas al Estado en impuestos, aunque su propietario, claramente, no está preso sino sentado en la Casa Rosada.
¿¡Otra vez Elecciones!?
El tema electoral, un claro dolor de genitales para el gobierno que incluso llegó a proponer por boca de la incontinente Gabriela Michetti suprimir las intermedias se ha convertido en este 2019 en una verdadera pesadilla y ayer domingo no fue la excepción.
Si bien sus personeros hacen piruetas tratando de justificar lo injustificable y buscando en las más crueles derrotas una victoria, lo cierto es que ayer el gobierno obtuvo las peores derrotas imaginables.
Santa Fe
Ayer, en cambio, pese todas las campañas mediáticas tratando de instalar que Bonfatti era el candidato más votado y por tanto el favorito, se impuso la lógica de la única fuerza provincial que tuvo PASO y obtuvo la mayor cantidad de votos, la alianza que conforman el justicialismo y el kirchnerismo y sus aliados.
Y efectivamente se impuso Perotti, candidato del campo popular por alrededor de cinco puntos al candidato a gobernador del oficialista socialismo antiperonista y relegado a un humillante puñado de votos que no alcanzaba a llegar a la mitad de las obtenidas por el candidato ganador el hombre de Cambiemos.
Pero no queda allí la derrota del gobierno, sino que perdió la intendencia capitalina a mano de los socialistas, para redondear una jornada olvidable.
San Luis
Formosa
Tierra Del Fuego
Ya de antemano el hecho de que los dos candidatos que más medían respondieran al armado del Frente de Todos era un trago duro digerir, pero el resultado final, con la victoria del intendente de Río Grande, Gustavo Melella, un radical K integrante de Concentración Forja, uno de los partidos que integran la fuerza de la ex mandataria fue lo convirtió en insostenible.
Es que entre ambos candidatos han obtenido alrededor del noventa por ciento de los votos emitidos, Mellella algo más del cincuenta por ciento, según reconoció Bertone, la candidata más potable para el gobierno, aunque claramente recostada en la fórmula de los Fernández y el candidato de Cambiemos, con apenas un dígito de votos ni siquiera aparecía nombrado en los informes.
Como si todo esto fuera poco, Ushuaia, la otra intendencia importante de Tierra del Fuego, es gobernada por Walter Vuoto, de La Cámpora, y obtuvo su reelección por alrededor del cincuenta y cuatro por ciento.
Un domingo para olvidar
Pensando en la tapa de los diarios de hoy seguramente los operadores del gobierno le deben haber pedido a los jefes de sus medios partidarios (Clarín, La Nazión y demás) que den prioridad al apagón por sobre las palizas electorales, que solo pueden ser opacadas por el blooper de dejar a todo el país y otros tres países vecinos sin energía eléctrica.
¿De que manera el gobierno remontará estos resultados?
Los sofistas son muy hábiles y enunciado que 'claramente' este año ganan los oficialismos, algo con lo que se vio contradecido en Santa Fe y Tierra del Fuego, y que bajo ningún punto de vista podría justificar la hipótesis oficial de que los argentinos que repudian cada domingo de elecciones anticipadas al gobierno lo terminaran votando por 'ser el oficialismo'.
La única incógnita ahora es como aceptará la derecha la realidad de la repulsa popular y si seguirá respetando lo poco que ha respetado hasta ahora las reglas de juego.
Publicar un comentario