Arrastrando su fama de pistolero (hace años asesinó a balazos a una persona que supuestamente incursionó en su propiedad para robar), Bonadío supo ganarse un lugar en la historia desfigurando el concepto de justicia y exacerbando la arbitrariedad en sus fallos persecutorios de Cristina Fernández de Kirchner y otros dirigentes del Frente para la Victoria.
Con pena y consciente que no habrá gloria alguna, murió está mañana en su casa del barrio porteño de Belgrano, donde se encontraba con cuidados paliativos por una enfermedad terminal, confirmaron fuentes judiciales.
El magistrado, de 64 años, fue uno de los arietes de la persecución judicial a Cristina Kirchner y el cúmulo de arbitrariedades cometidas seguramente lo hubiera llevado al sillón de acusados en el Consejo de la Magistratura más temprano que tarde.
En mayo 2019, fue operado de un tumor en el cerebro y a las pocas semanas volvió a trabajar. En ese momento, se difundió un video del juez quien le decía a sus colaboradores: “Los registros sobre mi muerte están exagerados”.
Bonadio estaba a cargo del Juzgado Correccional y Criminal n°11 en Comodoro Py, lugar en el que cayeron las causas impulsadas por Cambiemos contra la vicepresidenta Cristina Kirchner y ex funcionarios kirchneristas.
De obvia afinidad con el PRO-Cambiemos, Bonadío desafío todas las reglas probabilísticas al quedarse con la cuasi totalidad de denuncias 'flojitas de papeles' del régimen macrista contra ex funcionarios kirchneristas y pese a su enemistad manifiesta contra la ex Presidenta, lo que de movida invalidaba su función de juez, no solo jamás se excusó, sino que además adelantó juicios asegurando que 'la metería presa'.
Ejemplo brillante de la justicia que ningún país que se considere democrático y con vigencia de Estado de Derecho puede tener, con Bonadío se va una parte de la gigantesca parafernalia de descrédito que un sector de la justicia y los principales medios de comunicación del país montaron para intentar evitar el regreso de un gobierno popular a la Casa Rosada.
No genera alegría su muerte, tampoco tristeza, más bien contrariedad por la impunidad que consiguió con su fallecimiento.
*Director de Diario Reporte Sur
Presidente del Círculo de Trabajadores de Prensa de Almirante Brown
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