Las declaraciones del abogado Dante Canónica, presunto testaferro del emérito Juan Carlos I, ante el fiscal suizo Yves Bertossa ponen en evidencia las órdenes que dio el entonces jefe de Estado español para “crear una estructura” en Suiza a través de la cual ocultar una “importante donación” que iba a recibir del fallecido rey saudí, Abdalá Bin Abdulaziz Al Saud, según revela este lunes el diario digital El Español.
El abogado declaró el 24 de agosto del 2018 que sospechaba que el rey emérito “ocultó cerca de 100 millones de dólares en Suiza”, los cuales podrían proceder del pago de comisiones ilegales por la adjudicación de la construcción del tren de alta velocidad a La Meca (una ciudad en Arabia Saudí), en el 2011, si bien la licitación fue en el 2006.
Canónica aseguró que la Fundación Lucum, con la que se canalizó esa donación, se había creado en la residencia oficial del rey Juan Carlos y relató los viajes que el gestor de cuentas en Suiza Arturo Fasana, también investigado por estos hechos, hizo a Washington (capital de EE.UU.) y a Basilea (una ciudad suiza) después de que el monarca le facilitara “las coordenadas” del entonces embajador saudí en Estados Unidos, Adel al-Yubeir, que iba a intermediar en la transferencia de los 100 millones de dólares.
El abogado afirmó que había conocido a Juan Carlos a finales de 2007 o a principios de 2008 “con Arturo Fasana en el Palacio de la Zarzuela”, y después se reunió varias veces más con él.
En esa primera ocasión, según manifestó, les explicó a Fasana y a él, que su amigo, el entonces rey saudí, quería hacerle una importante donación.
La lista de escándalos que han opacado en los últimos tiempos a la monarquía española es larga, como el caso Nóos y la condena al marido de la infanta Cristina, Iñaki Urdangarin; el caso de la actriz Bárbara Rey; y más recientemente una serie de grabaciones filtradas en julio de 2018, en las que la supuesta amante del rey emérito, Corinna zu Sayn-Wittgenstein, le acusa de cobrar parte de una comisión de 100 millones de euros por la licitación de la mencionada línea ferroviaria a La Meca a la compañía Alta Velocidad Española (AVE).
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