Para formalizar la entrega, el titular en el Ejecutivo local -Andrés Watson- secuenció los avances de una institución que “quienes nacimos en Florencio Varela conocimos la historia de la ex fábrica transformada en escuela hacía muchos años, con amigos, amigas, vecinos y vecinas que fueron la primera promoción de esta Secundaria”.
Por ese motivo, indicó “el progreso de las obras edilicias proyectadas en el inmueble” como parte de las intervenciones ideadas “para potenciar el proceso de aprendizaje y enseñanza”. En ese contexto, fue cuando apreció la incorporación de los equipos tecnológicos “a la dinámica pedagógica con el nombre de cada uno de ustedes: para aprender, pero también disfrutar”.
El jefe distrital de Educación, Alfredo Schveizer, valoró no solo las labores de infraestructura sino la adjudicación de netbooks vinculados “a una mirada de gestión municipal, provincial y nacional para garantizar derechos”. En ese instante, habló de “defenderlos, sostenerlos, pensar en las decisiones políticas en favor de la igualdad”.
La directora -Verónica Cachaza- subrayó el contacto con los seres queridos “todos los días, pero hoy con esta alegría: una inversión en la educación de sus hijos con máquinas, salones, baños”. A modo de conclusión, hizo referencia al “renacer del `Homero Manzi´”. “¡Feliz de pertenecer a esta comunidad!”, afirmó.
Santiago Guerrero y Brandon Andrada culminaron sus clases. El cierre de su miércoles escolar fue en el patio techado. El primero de ellos pensó “usar la compu para estudiar, con el celular fue complicado sobre todo para hacer un PDF o enviar un archivo a imprimir”. El segundo joven coincidió en priorizar la formación y calificó a la propuesta como “muy buena”.
Estuvo presente la secretaria de Educación, Andrea Digiobani; consejeros escolares; los facilitadores digitales de la Dirección de Tecnología Educativa de la Provincia de Buenos Aires; entre otros.
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