"Arabia Saudita decidió reanudar el trabajo de su misión diplomática en Siria", declaró el Ministerio de Relaciones Exteriores de Riad en un comunicado divulgado por la agencia noticiosa oficial SPA.
Poco después, Damasco emitió un anuncio similar: "La República Árabe Siria decidió reanudar las actividades de su misión diplomática en Arabia Saudita", publicó la agencia estatal SANA.
El acercamiento se da dos días después de la reincorporación de Siria a la Liga Árabe, anunciada el domingo en El Cairo.
Damasco había sido separada de esa organización árabe en 2011 tras la sangrienta represión de un levantamiento popular que desencadenó la guerra civil.
El conflicto, que involucró a actores regionales e internacionales, dejó cerca de medio millón de muertos.
Casi la mitad de los sirios son ahora refugiados o desplazados internos y algunas partes del país siguen fuera del control del Gobierno, consignó la agencia AFP.
Bashar al Assad dejó recientemente su condición de persona non grata gracias a la solidaridad que generó en el mundo el terremoto que sufrió el país en febrero y que devastó amplias zonas locales y de Turquía.
El presidente sirio también se benefició del inesperado acercamiento entre dos grandes rivales, Arabia Saudita e Irán, su gran aliado.
El domingo, en la capital egipcia, los ministros de Exteriores de la Liga Árabe decidieron readmitir a Siria, aunque no avanzaron en los mecanismos para llevar adelante ese paso.
"Tenemos la responsabilidad histórica de estar al lado del pueblo sirio para ayudarle a pasar esta triste página de su historia", dijo entonces el ministro de Exteriores egipcio, Sameh Shukri, al poner en palabras el gesto básicamente solidario.
Ya en los últimos meses varios países de la región, incluyendo a Arabia Saudita y Egipto habían vuelto a comprometerse diplomáticamente con Siria, con visitas y reuniones de alto nivel.
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