El expresidente del Perú, Alejandro Toledo, vive su hora más oscura. El caso Ecoteva, que investiga la compra de inmuebles con dinero recibido de presuntos sobornos por licitaciones irregulares a las empresas Odebrecht y Camargo Correa, le ha valido un nuevo pedido de extradición y una acusación penal por parte del Ministerio Público.
La solicitud se basa en las declaraciones del Josef Maiman, empresario y ex testaferro de Toledo Manrique, que fueron recogidas en marzo pasado.
Ante esto la defensa de Alejandro Toledo, que reside en California, Estados Unidos, desde el año 2017, se mostró tranquila pues creen que lo dicho por Josef Maiman ya forma parte del primer pedido de extradición por el caso Odebretch, presentado al Gobierno estadounidense en el año 2018.
Rafael Vela, fiscal coordinador del equipo especial “Lava Jato”, aseguró que lo dicho por la defensa no es cierto y consideró que esta segunda solicitud de extradición complementará el primero y tendrá más probabilidades de ser exitosa pues adjunta una acusación y pedido de 16 años de prisión por presunto lavado de activos contra el exmandatario, su esposa y ex primera dama Eliane Karp y sus exasesores de seguridad.
La corrupción en el Perú alcanzó a expresidentes y líderes políticos. Ollanta Humala estuvo preso, Alan García se suicidó antes de ingresar a la cárcel, Pedro Pablo Kuczynski cumple arresto domiciliario y Keiko Fujimori permanece en un penal.
Alejandro Toledo es el único que disfruta de su libertad en Estados Unidos pese a que sobre él recae una orden de prisión preventiva. Las autoridades peruanas esperan que este nuevo pedido de extradición se resuelva a la brevedad.
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