Turquía confisca cientos de respiradores de España, en lo que se ha convertido una batalla mundial por hacerse con equipos médicos para el coronavirus.
La ministra de Exteriores de España, Arancha González Laya, informó el viernes en rueda de prensa de que el Gobierno turco había bloqueado en Ankara, capital turca, un avión proveniente de China cargado con respiradores para enfermos de coronavirus adquiridos por España “para el tratamiento de sus propios enfermos”.
De acuerdo con González Laya, una vez embarcados los respiradores en el avión, la aduana turca retuvo el pasado sábado el material sanitario comprado por el Ministerio de Sanidad de España y pagado por los gobiernos autonómicos de Castilla-La Mancha y Navarra para reforzar sus Unidades de Cuidados Intensivos (UCI) ante la expansión del coronavirus.
Añadió que había hablado tres veces ‘sin éxito’ con su homólogo turco para desbloquear el cargamento y explica que el Gobierno turco ha impuesto restricciones “de amplio espectro” a la exportación de productos sanitarios, aunque no le pertenezcan como es el caso, para “abastecer su propio sistema sanitario frente a esta pandemia”.
El Ejecutivo de Turquía ha asegurado que ese material podrá llegar a España “en unas semanas”. Sin embargo, el Gobierno, de hecho, da por perdido el material, ya que fuentes de Exteriores son escépticas ante una entrega que temen no se va a producir.
Los suministros médicos disminuyen en todo el mundo debido a la crisis de salud provocada por el nuevo coronavirus, denominado COVID-19, al punto de que los equipos y las mascarillas se han convertido en un bien preciado y decenas de países luchan por conseguirlos, por lo que se han incrementado las ofertas y han escalado los precios.
El viernes, las autoridades sanitarias alemanas denunciaron la “piratería moderna” de EE.UU., que usando métodos del “salvaje oeste”, se apropia de mascarillas en medio de la pandemia.
Además, Francia informó que los estadounidenses habían pagado tres veces más para arrebatarle una carga que estaba a punto de ser embarcada en un avión destinado al país europeo.
El nuevo coronavirus, detectado por primera vez en diciembre de 2019 en la ciudad china de Wuhan, se ha propagado por más de 200 países del mundo y, según las últimas cifras, ha dejado 1 152 624 contagiados y 61 618 muertos a nivel global.
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