Con la presencia de dirigentes como los diputados nacionales por el Frente de Todos Hugo Yasky y Walter Correa; el secretario General de la Asociación Gráfica Bonaerense y dirigente de la Corriente Federal de los Trabajadores, Héctor “Gringo” Amichetti; el referente del Movimiento Arraigo, Pedro Peretti; el presidente de la Asociación Pyme, Daniel Moreira; el director del Centro de Estudios Agrarios, Matias Strasorier; el presidente de la Confederación Nacional de Cooperativas de Trabajo, Christian Miño; entre otros, se plantearon temáticas de coyuntura, con el objetivo de articular las diversas demandas que de todos los sectores y generar una propuesta conjunta que fortalezca una política económica basada en la producción y el trabajo nacional.
Luego de la reunión, Amichetti destacó que con este encuentro se amplió una iniciativa que había surgido de parte de los sindicatos de la industria, la CTA y la Mesa Nacional de Unidad Pyme, y valoró la importancia de “consolidar una alianza de las fuerzas de la producción y el trabajo para acompañar a las decisiones del gobierno, que tiene la difícil tarea de revertir una política económica de especulación”.
“A todos nos une la búsqueda del pleno empleo como objetivo. Fue un encuentro muy enriquecedor porque se sumaron organizaciones de pequeños y medianos productores, el cooperativismo está representado, se amplió el espectro pyme y los sindicatos fortalecimos la línea inicial con la perspectiva de seguir haciendo crecer la alianza. Poder articular lo que plantea cada sector individualmente en un proyecto conjunto es el desafío que tenemos por delante”, remarcó Amichetti.
“Será importantísimo urbanizar el debate agrario y darle visibilidad al tamaño de las explotaciones agrarias. La derecha siempre le hizo creer al conjunto de la sociedad que el tema agropecuario era intrasector, que no debían participar los sectores urbanos y eso es un tremendo error. El problema agropecuario debe ser un debate de toda la sociedad, porque del suelo sale el 98 por ciento de los alimentos que consumimos. Y no es lo mismo una mega granja de 12.500 madres, que otra de 50 madres. Son cosas distintas que merecen una discusión impositiva, también”, afirmó Peretti después de la reunión, desde el lado de los pequeños productores agrarios.
Moreira, por su parte, consideró que el encuentro deja de manifiesto una “oportunidad histórica” para los sectores vinculados a la producción y el trabajo. “El objetivo es que la suma de los sectores productivos de a pie se traduzca en la movilidad social ascendente de todos los trabajadores, con el desarrollo de la productividad pyme”, subrayó.
En este marco, Strasorier abogó por “romper con las antinomias históricas de campo-industria” para “repensar un modelo productivo nacional que abandone el desarrollo desigual de la ‘patria cerealera’, que miraba más a Europa que a las provincias y a las localidades de la Argentina”.
Desde el sector cooperativo, Miño expresó su “orgullo” de participar de la convocatoria e instó a “seguir fortaleciendo el espacio, haciéndolo más federal, para poder llevarle las propuestas del sector al gobierno y mejorar las condiciones de gestión en los niveles nacional, provincial y municipal”.
En la reunión también estuvieron presentes representantes de la Mesa Nacional de Unidad Pyme (MNUP), la Agrupación Grito de Alcorta, la Confederación Argentina de Trabajadores Cooperativos Asociados (CONARCOOP), la Federación de Cooperativas de Trabajo de la República Argentina (FECOOTRA), la Federación Argentina de Cooperativas de Trabajadores Autogestionados (FACTA), cooperativas, mutuales y movimientos sociales.
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