“Realizamos la operación ‘Tormenta 2’ en la profundidad de los territorios de los Emiratos Árabes Unidos (EAU) y Arabia Saudí. El Ejército y los comités populares de Yemen atacaron sus objetivos con misiles y drones, en respuesta a las últimas agresiones saudíes y emiratíes contra los yemeníes”, ha señalado este lunes el portavoz del Ejército de Yemen, el teniente general Yahya Sari, en una conferencia de prensa.
Según la información facilitada por Sari, en el marco de esta nueva operación, las fuerzas yemeníes lanzaron varios misiles balísticos, tipo Zolfaqar, contra la base aérea de Al-Zafra y “otros objetivos vitales” en Abu Dabi, capital de los EAU.
Asimismo, ha proseguido, posiciones sensibles y estratégicos emiratíes fueron bombardeados por varios aviones no tripulados (drones), tipo Samad-3, en la ciudad de Dubái.
Po otro lado, el Ejército yemení llevó a cabo una operación a gran escala en el territorio saudí, apuntando con drones Samad-1 y Qasef-K2 contra puntos clave en la región de Sharura, sita en la provincia sureña de Najran, ha informado el portavoz, agregando que también en las ciudades de Asir (sur) y Jizan (suroeste), posiciones saudíes sensibles y estratégicas fueron atacadas con una gran cantidad de misiles balísticos. Estos misiles alcanzan sus objetivos con precisión, ha destacado.
El ataque contra las posiciones saudíes se ha producido después de que los aviones de combate del reino árabe bombardearan el viernes una cárcel en la provincia de Saada, en el noroeste de Yemen, dejando al menos 82 muertos y unos 266 heridos.
El general Sari ha subrayado la plena disposición de las Fuerzas Armadas de Yemen para expandir sus ataques contra Arabia Saudí y los EAU. “Una vez más, les decimos a las empresas e inversores extranjeros que el pequeño país de los EAU es inseguro”, ha avisado.
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“Los Emiratos están constantemente bajo nuestros ataques. Mientras continúe la agresión y el asedio contra Yemen, nuestras operaciones militares continuarán”, ha advertido.
De hecho, las fuerzas yemeníes realizaron la semana pasada la operación “Tormenta 1”, dentro del marco de la cual, lanzaron cuatro misiles Quds contra el aeropuerto de Abu Dabi y la refinería de petróleo Al-Musafah, y misiles balísticos Zolfaqar contra aeropuerto de Dubái.
Las tropas yemeníes también recurrieron a drones de largo alcance Samad-3 para atacar objetivos sensibles e importantes en la operación de la víspera.
Los EAU han formado parte de la llamada coalición —liderada por Arabia Saudí y respaldada por EE.UU.— que inició en marzo de 2015 una campaña bélica contra la nación yemení con el fin de llevar de vuelta al poder al gobierno del expresidente yemení Abdu Rabu Mansur Hadi y aplastar el movimiento de resistencia popular Ansarolá.
Ante tal situación, las fuerzas armadas yemeníes y los comités populares aliados se hacen cada vez más fuertes, de modo que Riad y sus socios no han logrado ninguno de sus objetivos y su agresión solo ha provocado la muerte y desplazamiento de millones de los civiles yemeníes, así como la destrucción de la infraestructura y la propagación de hambruna y enfermedades infecciosas en el país más pobre del mundo árabe.
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