“Las tropas estadounidenses aún ocupan los principales campos petroleros y las regiones productoras de trigo en Siria. El saqueo de los recursos sirios por parte del Ejército estadounidense ha agravado la crisis humanitaria sobre el terreno”, denunció el portavoz del Ministerio de Exteriores de China, Wang Wenbin.
Así, Wang respondió cuando en una rueda de prensa celebrada el miércoles le preguntaron acerca de los informes que ponen al descubierto que las fuerzas estadounidenses trasladan petróleo sirio al norte de Irak.
El vocero chino cuestionó las proclamas de Estados Unidos en defensa de los derechos humanos, poniendo como ejemplo que sus acciones en Siria prueban que en realidad falla en este aspecto.
Dicho eso, exigió a EE.UU. respetar la soberanía y la integridad territorial de Siria, levantar las sanciones unilaterales que afectan directamente a la nación siria y compensarla por todos los daños causados, así como poner fin inmediato al saqueo de los recursos naturales de este país árabe.
Sin contar con la autorización del Gobierno sirio, presidido por Bashar al-Asad, y bajo el pretexto de la lucha antiterrorista, Estados Unidos y sus aliados, en forma de una llamada coalición, se instalaron en 2014 en el territorio del país árabe. Ante ello, Damasco ha denunciado repetidamente las enormes pérdidas humanas y materiales como consecuencia de las acciones de las fuerzas ocupantes.
Las autoridades sirias acusan a Washington de saquear los recursos del país, además de pertrechar, entrenar, financiar y armar a las bandas terroristas, a fin de derrocar al legítimo Gobierno de Al-Asad.
Por su parte, Irán y Rusia han salido en defensa de Siria ante las medidas ilegales de EE.UU. y exigen la retirada lo antes posible de las fuerzas de ocupación de este país.
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