Hernández formalizará su decisión mañana, presuntamente en una reunión de la Comisión Primera del Senado con el jefe de la Misión de Observación Electoral de la Unión Europea en Colombia, Javi López, pero los medios bogotanos ya la dan por descontada y él mismo hizo declaraciones en tal sentido.
"He hecho lo que he podido. He participado, he opinado en los proyectos de ley donde me siento con identidad de agregar valor. Es por eso que estando en el Senado quiero decirles a los colombianos que hemos tomado la decisión de retirarnos porque siento que estoy robando el salario”, afirmó Hernández.
Pero, además, el dirigente de la Liga de Gobernantes Anticorrupción explicó que dejaba su lugar “para ver si es posible” que el departamento de Santander lo “acepte como su candidato a la Alcaldía, a una de las alcaldías del departamento o a la Gobernación”.
“Para no inhabilitarme, pues me toca renunciar. Ahí sí puedo prestar un gran servicio", aseguró, en declaraciones que recoge el diario El Espectador.
Hernández, quien hizo campaña como candidato anticorrupción pese a estar investigado por presuntas irregularidades en la licitación de un contrato público cuando era alcalde de Bucaramanga, logró llegar de manera inesperada a la segunda vuelta de las elecciones, en las que más de 10,6 millones de colombianos apostaron por un discurso antipolítica.
“No aporto lo que los colombianos aportan fiscalmente en un salario tan bueno como el que pagan acá, a pesar de que la totalidad de la plata la estoy aplicando en proyectos de Santander que benefician a los más pobres", insistió el exalcalde para justificar su decisión.
La Constitución colombiana reserva una plaza en el Senado para quien sea segundo en las elecciones y una en la Cámara de Representantes para su compañero de fórmula, en este caso Marlene Castillo.
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