“Creo que vamos a tener dificultades para bajar la inflación a una meta del 2% (anual) salvo que la economía se ralentice sustancialmente”, señaló Summers en una conferencia en Chicago, según la agencia Bloomberg.
El exfuncionario durante la administración de Bill Clinton, profesor en la Universidad de Harvard, dijo que el estímulo fiscal y las bajas tasas de interés durante la pandemia transformaron a Estados Unidos “de un país con una inflación del 2% a un país con una inflación del 5%”.
Anteriormente, Summers opinó que las posibilidades de una recesión están aumentando cada vez más, y que la FED se estaba acercando al final de su ciclo de subas de tasas de interés.
En ese sentido, sobre la próxima reunión monetaria de la FED –que se desarrollará el martes y miércoles próximos-, consideró que la entidad monetaria incrementará las tasas en 25 puntos básicos.
Al mismo tiempo, Summers cuestionó a la FED y consideró que “perdió credibilidad” por estar “por detrás de la curva” a la hora de enfrentar la inflación.
Al igual que otros analistas y economistas, el exsecretario del Tesoro evaluó que la crisis bancaria del mes pasado está derivando en una “constricción del crédito” por las posturas más conservadoras que están adoptando los bancos, lo cual está haciendo parte del trabajo de las subas de tasas de la FED, al enfriar la demanda.
“No necesitamos tantas subas de tasas que las que necesitaríamos si el sistema bancario funcionase sin problemas”, opinó.
Por último, Summers desestimó las posibilidades de que los legisladores demócratas y republicanos no llegan a un acuerdo por el techo de deuda y que Estados Unidos caiga en un default, y consideró que tales chances son “inferiores al 2%”.
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